Hoy buscamos las charcas del Hontanar de La Cabrera

13 / 06 / 2025

Cuando aprieta el calor, caminar a primera o última hora del día se hace mucho más llevadero. Especialmente, si comienzas a andar al poco del amanecer, en la Sierra Norte de Madrid suele notarse el frescor de la mañana, por mucho calor que pueda hacer durante el resto del día.

SierraNorte.com nació en La Cabrera, y este pueblo de la Sierra Norte sigue siendo nuestro lugar de referencia. Aquí pasamos parte del año, especialmente durante de los meses de verano. Y desde La Cabrera damos paseos mañaneros cuando durante el día el calor aprieta.

Una de nuestras opciones más habituales es subir, por el camino asfaltado, hasta el Convento de San Antonio, que está al pie de la montaña, y es una visita recomendada. Es una joya románica, aunque solo se puede acceder en el horario de misas (domingos y festivos a las 19:00, en verano; y a las 17:30, en invierno) y durante las visitas guiadas (martes, jueves y sábados, a las 11:00, 12:00, 16:00 y 17:00, y domingos a las 11:00). Además de contar con unas grandes vistas, alberga unos coquetos jardines con fuentes y estanques, y un interior románico primitivo donde la sencillez y la austeridad recuerdan a los tiempos de los que es originario, allá por el siglo XI. La subida desde el pueblo, a unos dos kilómetros, supone salvar cerca de unos 200 metros de altitud, que puede resultar un poco cansado si no se tiene el hábito de andar. Pero si se quiere visitar el convento, también se puede llegar en coche.

Otro paseo más corto, y con menos desnivel, es por una zona de la dehesa que se llama El Hontanar, donde abunda el agua, hay algunas charcas, y resulta bastante atractivo. La Cabrera es una zona con manantiales y mucha agua subterránea, y hasta finales del siglo XX lo habitual era que todas las casas tuviesen su propio pozo para su suministro. Incluso, aunque ahora está cerrada, durante muchos años estuvo funcionando la planta de embotellamiento de agua Fonsana.

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Desde el pueblo, partiendo de la plaza de la iglesia, o desde la del ayuntamiento, podemos tomar el camino hacia el convento, desviándonos hacia la dehesa junto a una de las charcas. Siguiendo el camino de la "ruta por la historia", se llega más allá hasta la carretera del convento, y poco antes, bordeando un cercado, se accede a otra de las charcas, escondida, entre rocas y árboles, que se puede localizar siguiendo el croar de las ranas que allí se acumulan. Cerca de esta charca, hay un abrevadero del ganado, y, desde este punto, se puede volver al camino del convento, para seguir hasta el recinto religioso, a la izquierda, o bajar por la derecha hasta el pueblo.

Con este calor, lo más recomendable es pasear con el fresco de la mañana, o al atardecer, llevar agua, protección solar, y, mejor, con pantalones largos. Además, para completar la experiencia, puede comer o tomar algo en los restaurantes de La Cabrera y descansar con toda comodidad en alguna de las casas rurales de La Cabrera.

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